[LC] Y la historia continúa. Sobre ‘La canción de los sueños rotos’ de Isabel Fernández Madrid

No siempre los cuentos tienen un final feliz y es algo a lo que quizá nos deberíamos acostumbrar. O bueno, mejor que un final feliz, uno que no sea perfecto. Los seres humanos tenemos cierta intolerancia innata al fracaso y si a eso le añadimos que a nuestras ficciones, les pedido que nos alegren y evadan un poco del día a día, cuando una novela osa ofrecernos un fin así, nos quedamos un poco perplejos, como mínimo.

Sobre finales de cuento va hoy nuestra reseña en la que volvemos a los mundos de cuentos de hadas, a la ciudadela de Isabel Fernández Madrid y su novela La canción de los sueños rotos, fin de la bilogía comenzada con El bosque de los niños perdidos del que ya hicimos reseña en el blog. Con este fin de bilogía, descubriremos si los finales felices son tan felices como nos los pintan. Gracias a la editorial Hela Ediciones por organizar esta segunda lectura conjunta. Espero que os guste.

*Se trata de la reseña de una segunda parte. Puede contener spoiler de la primera.                                                            

«Eran demasiado jóvenes para protagonizar una guerra, demasiado niños para ser héroes o villanos, pero las batallas no entendían de edad».

Danielle Belrose ha cruzado el espejo y cambiado su realidad. Al otro lado se encuentra con Axel, quien liderará una rebelión con aquellos que nunca obtuvieron un final feliz.

La Ciudadela se prepara para la boda de Erik Everett y en Stardust comienza la semilla de la resistencia. Mientras Ian y Tatiana se enfrentan a lo que nunca imaginaron, Gala ve cómo su familia se desmorona poco a poco.

La chispa que inicia el caos se enciende, pero ahora te toca a ti elegir. ¿Magia o humanidad?

Un camino, un espejo

Danielle y Axel Belrose por fin se han reencontrado, aunque las circunstancias las haya propiciado Némesis Everett y no tenga muy claro qué pueda significar esto. Por su parte, Tatiana e Ian, separados del resto, deciden continuar el viaje al norte, con la esperanza de encontrar respuestas y a sus amigos. Finalmente, Gala, sola por primera vez en tres años realizará un viaje que le llevará a conocer la verdad tras su familia.

Y es con estos tres polos con los que seguirá la guerra que veíamos cómo se preparaba en la novela anterior. Cada uno de estos tres puntos nos enseñará un lugar del gran mundo que rodea a la Ciudadela: Gala nos llevará a la escuela Stardust, donde los estudiantes más avanzados comienzan a sospechar que algo inminente va a pasar; Tatiana e Ian nos llevan al norte, donde descubrimos que la guerra es inminente y para la que no hay marcha atrás; y, finalmente, Axel y Danielle nos harán entender un poco mejor a los personajes de cuento, incluida la reina de corazones: qué es lo que han perdido, qué es por lo que luchan, cuáles son sus verdaderos planes…

La guerra continúa en este parte, sí, a pesar de que los campeones contendientes de ambos bandos no están preparados y realmente no comprenden por qué están con quienes están aliados. Se trata de una pelea en la que el lector, ni los personajes, no conocen la verdad y en la que no podremos determinar quiénes son los «buenos» no quiénes son los «malos»

Las diferentes caras del espejo

Y así, como tenemos tres puntos, encontraremos la temática en tres parámetros diferentes: el bien, el mal y la venganza. Lo curioso es que encontramos ese estado intermedio, la venganza, que fluctúa durante toda la novela entre lo que entendemos como bien y mal. De ahí, precisamente, el que no podamos alinearnos con ninguno de los bandos o personajes, siempre es un «sí entiendo, pero…». No será hasta el final cuando se define esa tercera cara del espejo que parecía que solo tenía dos.

Sin embargo, no solo estos serán los temas de la novela, ya que la autora sigue incluyendo de manera magnífica cuestiones sociales de nuestra más inmediata actualidad. Ya en la primera parte se veían reflejadas, pero en esta segunda se explicitarán temas como la homosexualidad, la bisexualidad, la identidad de género… No creamos que se hace «gracias a que son personajes de cuento», ya que encontraremos todo en todos, pero especialmente, con aquellos que nos podemos identificar: los humanos.

Un mundo ¿ideal?

La verdad es que una de las cosas que más nos ha divertido, cuando hablábamos por el chat de la lectura conjunta, era intentar adivinar qué personaje de cuento era quién. Sin embargo, cabe reconocer a la autora lo bien que los ha encubierto y lo terrorífico que ha sido descubrirlo. La aparición de los personajes de cuento será más patente, más explícita en esta segunda parte y por ende los entenderemos mejor, sus anhelos, sus motivaciones.

Sin embargo, lo dicho, la autora también consigue desmitificar  ese mundo friendly de los cuentos de hadas y aquellos que asociamos con lo bondadoso, lo amable, etc. nos enseña en esta novela su peor cara. Mira que soy chica Disney, pero muerta de miedo con algunos amigos de estos cuentos.

Complicaciones finales

Sin embargo, a pesar de que me he enganchado a la novela con ganas, el final me ha dejado un regusto agridulce. Creo que el conflicto con los elegidos no está del todo justificado. En mi opinión el encuentro entre Axel y Tatina se hace muy tarde en la narración, con lo que no queda espacio para que se conozcan, se odien, se perdonen si llega el caso, etc. En este sentido, siento que todo se precipita en una espiral que quita epicidad a todo el final.

Además, la motivación de la maldad de Axel es muy repentina, teniendo en cuenta que parece que todo el resto de personajes tiene más motivos para verse afectados por lo que sucede. No sé si hubiera imaginado otro final, pero sí me hubiera gustado que este fuera más extenso.

Últimas notas

No obstante, cabe decir que la bilogía en su conjunto me ha gustado bastante. Me parece que Isabel nos plantea un mundo muy original y muy bien integrado donde los cuentos y los mundanos se implementan en un conflicto muy bien explicado. Además, su prosa, como en la novela anterior, es de una delicadeza y capacidad descriptiva muy interesante y que se lee poco.

¿Me hubiera gustado un final más extenso? Sí, pero creedme no creo que vayáis a encontrar una fantasía de este estilo, que se aleje del retelling, y que convierta en ajeno todo aquello que conocemos. Espero que os lancéis a la Ciudadela, a Nunca Jamás y contéis estrellas cada día. 

El libro en el Bolsillo

Puedes adquirir el libro 👉: La canción de los sueños rotos de Isabel Fernández Madrid

Puntuación: