Este relato nos lleva desde el crimen por los intereses hasta la descripción de las realidades delictivas. En primer lugar, más centrado en resolverlo y después en descubrir qué se esconde tras el delincuente, este tipo de relatos y novelas nos describen la sociedad a partir del siglo XIX en adelante.
La antología que presentamos hoy aquí, Antología del relato policial, publicada por Vicens Vives, recoge relatos desde el inicio del género hasta nuestros días, una selección que no se la puede calificar de otra manera que de completa e ilustrativa. Además, encontraremos, al inicio de la misma, un breve estudio sobre el género donde podremos aprender no solo cuál es su origen sino también los diferentes tipos de relatos policiales que podemos identificar según cuál sea el foco de la narración (relatos de hipótesis, de investigación, etcétera). Espero que os animéis con ella.
En este recorrido histórico por el relato policial encontramos todos los grandes temas del género, desde el enigma de la habitación cerrada al crimen perfecto, mientras vemos desfilar a los detectives más famosos de la historia de la literatura: el inimitable Sherlock Holmes, el cínico Sam Spade o el infalible Ellery Queen. Gracias a los relatos de Conan Doyle, Dashiell Hammett, Berkeley Cox o William Irish el lector podrá experimentar el inigualable placer de dar con la solución de una variopinta serie de misterios.
Una variedad selecta
Si observamos con lupa, cual detectives, los relatos que se han escogido para esta antología, encontraremos que representan una buena variedad tanto de autores como de géneros. Relatos de todos los ritmos y con la complejidad progresiva que presentó el género en su evolución.
Así, comenzando con la La banda moteada, relato de Conan Doyle
y su famoso detective Sherlock Holmes,
pasando por James M. Cain y su Hombre
muerto, donde comenzamos a ver el punto
de vista del criminal, hasta llegar a nuestros días con No mires atrás de Fredric Brown donde el
personaje rompe la cuarta pared e
involucra al lector en su crimen; el lector irá encontrando relatos no solo con
los que disfrutar de la deducción de sus protagonistas, sino con la propia. Una buena muestra de lo que el género nos
puede ofrecer a pequeña escala, pero muy bien elegida.
El detective y el asesino
En este sentido, he disfrutado mucho la antología, ya que han sabido reflejar los diferentes tipos de detectives que podemos encontrar junto con sus características. Así, Sherlock nos muestra cómo a veces, en aras de la verdad, el investigador puede estar por encima de la moral si así resuelve el crimen; Ellery Queen nos enseña que el detective es también humano y nos deja seguir y anticiparnos a sus deducciones.
Sin embargo, a parte del detective, la antología también recoge relatos donde el pensamiento criminal es el foco de la narración. En algunos de ellos veremos cómo se intenta buscar la bondad en el malvado cuando ni si quiera lo es, solo es un desafortunado, como sucede con Hombre muerto, la historia de un hombre que buscando una vida mejor en la huída mata a un policía. En otros, encontraremos las motivaciones reales para perpetrar el crimen que, sin ser legítimas, son comprensibles y casi admisibles por parte del lector.
Experimentos criminales
Y siendo esta una buena muestra, la antología no se detiene aquí sino que también nos enseña relatos que se salen del guion habitual de la policíaca, como es el caso del relato de William Irish Si muriera antes de despertar, donde el detective es un muchacho que reflexiona lo que podemos o no podemos hacer ante el crimen cuando no somos conscientes del mismo. Un relato que destaco porque desgarra e impacta, donde el hombre que espera a la salida de la escuela está más presenta que nunca y que nos lleva desde una tensión narrativa brutal a un supuesto happy ending. Si así lo queremos considerar…
A parte de este, podemos encontrar otros donde lo cómico es el centro, como sucede en el relato de Dashiell Hammett, Solo pueden colgarle una vez, o donde el relato sirve para explicar que la motivación del crimen pude ser la más mundana del mundo, como sucede en El azar vengador de Anthony Berkeley Cox.
Sin embargo, si tuviéramos que destacar otro entre esta gran selección, destacaría el último No mires atrás de Fredric Brown. En él, el autor hace partícipe al lector rompiendo la cuarta pared y amenazándolo sin ninguna piedad, un relato que nos lleva por los entresijos de un crimen y que desde luego nos hace mirar hacia atrás más de una vez.
Para aprender y enseñar
Desde luego, de todas las antologías que he leído hasta ahora de la editorial, esta es sin duda la que más me ha gustado e impactado. Acostumbrados al thriller como obra de consumo, sumergirse en sus orígenes y sus tipos es una actividad muy intensa e interesante. Indudablemente, os animo a acercaros a ella y a echar un buen vistazo a los relatos seleccionados, ya que creo que os sorprenderá y gustará. Espero que os animéis con ella.
¡Hola! Me parece una buena opción para los amantes de la policíaca, pero tengo que reconocer que no suelo leer libros del género, así que no sé cómo de realmente relevante se me haría esta antología. Por el momento prefiero dejarlo pasar.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
¡Hola! A nosotras nos encantan las historias policiacas pero no tanto los relatos. Lo tendremos en cuenta cuando tengamos huevos libres. Besitos. 🖤
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarMira que no soy muy adicta al género, pero admito que soy fan de Sherlock, así que me llama la atención la historia precisamente de lo que reperesenta, solo por eso ya es razón suficiente para decir... me lo llevo
Un bes💕
¡Hola!
ResponderEliminarPues lo cierto es que el thriller es un género que me encanta y que siempre disfruto mucho, sobre todo cuando el autor intenta ponerse en la piel del criminal y nos da también un poco de su visión. Así que no descarto esta antología, para adentrarme un poco más en el tema. Pero me ha surgido una duda... ¿hay alguna detective mujer en los relatos?
Besotes
♥ Amor y Palabras ♥
Hola!
ResponderEliminarpues no conocía el libro ni al autor, pero la verdad es que no suelo leer antologias :(
saludos