Una historia de una vida truncada de mil maneras nos trae hoy aquí con la novela Hojas caídas de Alejandro N. González. Una novela que nos sitúa en la vida de Axel, artista de profesión, que perseguirá un imposible como medio de salir de esa vida que lo vapulea constantemente. Gracias a Natalia por organizar la lectura conjunta.
Cuando piensa que todo transcurre de acuerdo a sus planes, la vida de una pareja de artista se torna complicada al enfrentar una serie de problemas que por inmadurez, no logran resolver. Ante la tristeza de la repentina soledad que experimentan y de haberlo perdido casi todo, conocen a un grupo de personas que les enseñan los valores importantes de la vida, aunque una tragedia los marca eternamente con un inesperado suceso con el que deberán aprender a vivir.
Un parque de hojas caídas
Cuando se conocieron en la universidad, Axel y Miranda miraron al futuro lleno de sueños y lucharon por ellos. Sin embargo, a veces la vida nos da golpes de los que es difícil levantarse. Ellos no lograron hacerlo, por lo que deciden, a pesar de amarse, separarse para aprender solos. Esto sumirá a Axel en una tristeza de la que se levantará apenas.
Así la novela nos sitúa en una historia donde el tema principal será el aprender a vivir con nosotros mismos. Nuestros fallos, nuestros miedos, nuestras desgracias nos rodean y Axel aprenderá a lidiar con ellas y a saber cómo dejar ir a aquellos que nos hacen, o hacemos, daño por no haber aprendido aún.
En este sentido, se nos presenta una novela dura, porque no podemos dejar de identificarnos con muchas de las situaciones a las que se enfrenta el protagonista, y la misma Miranda, su pareja. Somos capaces de identificar los fallos y saber por qué se cometen.
Impasse narrativo
Así, dentro de la clasificación literaria, podríamos decir que nos encontramos ante un relato costumbrista, un relato que nos cuenta la cotidianeidad de un personaje, dentro de la cual encontraremos la ambientación social, los sueños rotos debido al enfrentamiento del individuo contra la sociedad y las oportunidades que esta nos ofrece cuando parece que nos plegamos a ella.
Sin embargo, aunque la historia ha mantenido un tono serio o grave, bien es cierto que tiene salidas de tono narrativas, que no terminan de tener mucha coherencia ni con el personaje ni con el tono de la obra. Enfrentamientos demasiado agresivos, vueltas de tuerca que se acometen una y otra vez… Al fin y al cabo, situaciones que quizá por exageradas pierden potencia en el hilo conductor de la novela.
Trazados líricos
No obstante, la novela se lee de manera bastante fluida. Es verdad que el inicio quizá se hace un poco arduo porque en muy poco espacio nos da mucha información (la historia de Axel y Miranda), pero, una vez que comprender la totalidad de la misma, la novela se lanza hasta el final de la misma.
El lenguaje es sencillo y ameno, nos cuenta las cosas de manera directa y sin florituras. Sin embargo, no sé si es que en mi caso no comprendía bien el vocabulario o los modismos propios de la novela, pero lo cierto es que he tenido todo el rato la sensación de que el protagonista hacía una cosa y a las dos líneas pensaba la contraria, porque era lo que necesitaba la historia para avanzar. No sé, estos choques de ideas, así como algunos fallos de puntuación y tildes que quizá el autor debería revisar, me hacían desconectar y releer, llegando al mismo resultado.
El concepto que permanece
La verdad, es que no sé si podría decir con rotundidad que la historia me ha gustado, al igual que no podría hacerlo al contrario. La historia de Axel, como he dicho, es una historia con la que nos podemos identificar, porque al fin y al cabo a todos nos pasan cosas que nos debía de «nuestra idea original». En este sentido, la novela nos lleva bien, nos hace sentir y nos hace engancharnos.
Sin embargo, el estilo, la cuestión de los errores, las salidas de tono narrativas… han hecho que no termine de conectar del todo con la novela. En ningún momento he sentido que no me guste, pero tampoco me ha entusiasmado. Quizá la definición sería que me ha dejado fría. Os animo a ver qué tal y que me contéis cómo os ha resultado a vosotros.
¡Hola! Siento que haya sido una novela que no te ha terminado de convencer. Personalmente no es una lectura que me llame especialmente la atención, por lo que en esta ocasión prefiero dejarla pasar.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
¡Hola! Por lo que cuentas es una historia a la que falta algo y quizá por eso no te ha terminado de llegar del todo. Nosotras de momento la dejamos pasar. Besitos. 🖤
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarUfff si el personaje tiende a ser incongruente a mi es que me pone muy mala y entiendo que no sepas para donde tirar si te gusta o no la obra, en lo personal pienso que mejor lo dejo pasar.
Un bes💕
Lastima que no hayas acabado de conectar del todo con la novela.
ResponderEliminarAsí de entrada, a mi me fascinan las novelas duras en las que nos hacen reconocer los verdaderos valores de la vida.
Quizás la mire con más cariño y me anime a leerla.
B7s ♥
¡Hola!
ResponderEliminarPues una pena que te haya dejado un poco fría este libro, a mí me ha pasado justo con otro hace poco... No me convence mucho que hayas sentido que el personaje cambiara mucho de opinión. Pero bueno, veo que has conseguido sacar puntos positivos.
Un beso.
Hola!
ResponderEliminarGracias por una reseña tan maravillosa, tan bien estructurada y por ser sincera con respecto a ésta novela. La premisa me parece que puede engancharme, me gusta la cotidianidad y más si en el fondo tiene un mensaje moral o de autoayuda, pero es verdad que si no consigues conectar con los personajes ni te identificas del todo, se hace una lectura un poco difícil. Me la anotaré porque me ha parecido interesante.
Un CuiCui!
¡Hola!
ResponderEliminarLas novelas de este estilo me parecen realmente interesantes, pero no las veo para mí. Me ha llamado la atención lo que es la trama, y que se lea con facilidad. Una lástima que hayas sentido que algunas partes no tenían mucho sentido (eso he entendido) ^_^
La dejo pasar porque no creo que yo disfrutase mucho con esta obra.
¡Gracias por la reseña!
¡Hola!
ResponderEliminarLa verdad es que la sensación de que un libro te deje fría es bastante desagradable, porque no sabes si te ha gustado o no. A mí la verdad es que no me llama demasiado, y por lo que cuentas, no creo que me gustara tampoco. Y con tantos pendientes... Mejor dejar este pasar.
Besotes