[Reseña] Sin llanto, con sentimiento. Sobre 'Izahi, a tus hijas' de Laura S. Maquilón

No sé a vosotros, pero a veces me vuelvo poco constante con la lectura. No soy capaz de ser fiel a una novela y tengo que ir catando. Normalmente, me sucede en momentos vitales convulsos, donde no tengo nada a que agarrarme y lo que en realidad busco es ese libro que me absorba lo suficiente para no pensar en lo que pasa. Ha sido en estas ocasiones cuando he encontramos los libros que me han resultado especiales o me han llenado más.

En este ocasión, el que me ha dado un consuelo, aunque breve porque se trata de una novelette, ha sido la obra Izahi, a tus hijas de Laura S. Maquilón, publicada por Ediciones Hati. Esta obra de fantasía juvenil nos llevara a un mundo que respira y se rebela con nosotros. Espero que os guste.

Las izahikaris viven en comunión con la tierra, pero Saha anhela ir más allá, al mundo prohibido bajo las olas. Atrapada entre sus deseos y sus obligaciones, el miedo le impide encontrar la salida. Izahi, a tus hijas, habla de la amistad y del camino para encontrarse a una misma. ¿Será capaz Saha de desafiar las normas para conseguirlo?

Un mundo exuberante

Saha no está conforme con su vida y cerca de la celebración de su terikarden sigue debatiéndose entre lo que debe hacer y lo que desea. Una vida más allá, bajo el mar.

Izahi, a tus hijas es una novela que impresiona desde el minuto uno. La autora nos introduce en un mundo completamente fantástico donde seres naturales, los izahikaris, viven en comunión con la tierra a través de su árbol vida. De este modo, nos encontramos ante una narración enteramente natural que destaca por lo llena de vida que está con muy pocas palabras. La manera de narrar nos introduce en un mundo lleno de vegetación, de viento y agua que nos inunda los sentidos como, en mi caso, no lo hace otra narración.

Cosmovisión ser-humano

En ese mundo, Saha, como mencionábamos más arriba, tiene un deseo difícil de cumplir, le gustaría vivir en las profundidades marinas, donde se cuenta que la dragona maldición del mundo duerme. Sin embargo, no debe intentarlo, ya que un nuevo mal asola el mundo para los izahikaris, el ser humano.

En este sentido, me ha parecido una historia muy interesante ya que, aunque su tema principal es la amistad, como mencionaré a continuación, de la exposición que hace la autora podemos sustraer otros temas: la amenaza del ser humano al mundo natural, el sentimiento de que se es algo por nacimiento, pero que no se siente en identidad, las transformaciones que sufrimos para poder ser quienes queremos ser…

No obstante, sí cabe decir que la construcción del mundo es un poco compleja para el lector, que tiene que hacer un esfuerzo inicial y esperar a que las piezas encajen en su sitio.

Uno mismo y los demás

Nuestra protagonista, además de su anhelo interior, se nos mostrará como un ser muy introvertido, al que le falta confianza en él y en los demás, demasiado temeroso de las normas y con un rechazo a todo lo que implica su vida. El camino que comienza con su primera visión del mar y el impulso tomado ante esta vista será lo que mueva toda su acción.

Sin embargo, no estará sola, algo que tendrá que descubrir y asumir. Junto a ella encontraremos a Urk y Neko, dos izahikaris que, si bien no tienen los anhelos de Saha, sí consideran que el mundo no debe coartar la libertad de nadie. La amistad, como veréis, se eleva a su máximo exponente para garantizar algo casi sagrado, la libertad.

Hermoso y breve

Como os contaba más arriba, la obra ha llegado en un momento de zozobra lectora y creo que ha sido un poco mi salvación. Con una narración muy breve, pero hermosa, abundante y muy bien escrita la autora nos habla de cuestiones que nos afectan sea cual sea nuestro momento vital: la amistad, encontrarnos y no perdernos, la libertad.

Os lo recomiendo encarecidamente, un remanso en la zozobra y un canto de esperanza en la turbulencia. Espero que os guste.

El Libro en el Bolsillo

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