[Reseña] El valor de la importancia. Sobre ‘Caminos de libertad’ de Maite Carranza

 La adolescencia es una etapa de… Todo lo que nos pasa durante esos años es un drama y de la cosa que nos sucede que realmente es dramática no nos damos cuenta, así que nos hacen daño, juegan con nosotros, etc. Todo un momento vital clave para nosotros y somos unos auténticos ineptos. No sé si me hice profesora precisamente para intentar ser ese foco de advertencia, algo así como «fijaros como me ha ido a mí», o porque siempre he querido entender por qué la vida nos pone en ese brete.

En la novela que reseñamos hoy, encontramos a una muchacha justo en ese momento de no ser lo suficientemente mayor, pero tampoco pequeña como para que la vida no la ponga en determinadas situaciones. De todos modos, no hay que agobiarse, la novela no es un drama. Se llama Caminos de libertad de Maite Carranza y está publicada por la editorial Edebé. Espero que os guste.

¿Alguna vez os habéis sentido invisibles? ¿Habéis tenido la horrible sensación de que el chico que desearíais que os mirase no os ve, porque formáis parte del paisaje? ¿Habéis querido llorar cuando este chico os habla, pero os trata con la misma distancia, frialdad e indiferencia con la que trataría a la cajera del supermercado? Y puestos a preguntar, ¿os ha pasado alguna vez que quien os mira es el chico equivocado, el que no os gusta, el que de un día para otro se ha hecho íntimo de vuestros amigos, aparece en todas las fiestas y de pronto está en todas las redes y en todos los móviles? Me refiero a ese chico que, no se sabe cómo, acaba sentándose siempre a vuestro lado. A mí sí. Y este es el comienzo de la historia que viví el verano de mis diecisiete años, en el Pirineo, antes de adentrarme en un pasado familiar desconocido e inquietante.

Elecciones de la adolescencia

Alexia es una adolescente más, chicos que le gustan, las clases, sus amigos. Sin embargo, cuando está preparando el viaje que hará en verano con su grupo de scouts recibe una oferta que no podrá rechazar: el chico que le gusta le pide que le acompañe a la acampada en los Pirineos  con los lobatos. Y aquí comienza la tragedia, los chicos y una historia familiar que desentrañar.

La novela que presentamos hoy aquí tiene mucho de muchas cosas. Por una parte, se trata de una novela contemporánea Young adult que nos cuenta la historia de Alexia y cómo tiene que lidiar con un triángulo amoroso; pero también, nos encontramos ante una historia no muy común sobre la Guerra Civil: cómo huían los Republicanos.

En este sentido, vemos que la obra más allá de lo meramente adolescente y se atreve con una reflexión sobre la libertad y qué supuso esa huida para quienes tuvieron que llevarla a cabo. Eso sí, también encontraremos los temas relacionados con la adolescencia, más típicos, como el primero amor, pero también más complejos como el acoso.

No creo que sea cuestión de edad

No obstante, a pesar de que la temática del libro es francamente interesante, en mi caso no me he quedado del todo conforme con la manera de exponer las problemáticas. Sin querer destripar mucho sí que creo que hay algunas que se detectan desde el principio.

En cuanto a la parte relacionada con la historia no tengo mucho pero que poner. Creo que se trata con el tándem de delicadeza-crudeza adecuado, es decir, se nos cuentan los hechos duros y complejos que se sucedieron en la guerra, pero sin ahondar en la morbosidad. Además, nos expone un realidad que no es muy desarrollada  como son los «caminos de la libertad», las expediciones que se organizaban para pasar refugiados de un lado a otro, y se relacionan con nuestra actualidad, con lo que queda muy bien explicada.

Ahora bien, cuando nos pasamos a las problemáticas adolescentes ya es otra cosa. Lo primero que me llamó la atención fueron algunas actitudes de la protagonista, que sin ser extrañas en la realidad, sí que quedaban sin respuesta en la ficción. Por ejemplo, Alexia deja colgados a sus amigos en un viaje que están organizando para ese verano por irse con el chico que le gusta. Esto sucede, pero también sabemos que eso supone un conflicto con las amistades, que en el libro no aparece reflejado de ninguna manera.

En otro momento, hay un chico que claramente está acosando a Alexia, desde el minuto uno, pero ella lo identifica como  su «mejor amigo», que ha intentado estar presente en todas las esferas y dimensiones de su vida. Y esto podréis decir, Laura, sucede y a lo mejor los adolescentes no se dan cuenta, cierto, pero el problema es que el libro está dirigido a adolescentes, con lo que presentar estos hechos como algo normal creo que no es lo adecuado. Y segundo, que el tratamiento del acoso de facto no se realiza con la gravedad que se debería, es decir, cuando ya deja constancia en la novela del mismo la narración minimiza el suceso para poder encarrilar un happy ending, cosa que a mí particularmente no me ha gustado.

Al menos ágil

Eso sí, hay que reconocer a la autora el poder escribir una historia donde la acción es escasa y que está tenga una trama ágil, fácil de seguir y que engancha. Creo que eso lo consigue en gran medida por la accesibilidad de los diálogos, desde luego, y por el puntillo cómico que añade con el grupo de lobatos, de scouts pequeños, que hacen eso, cosas de niños pequeños. Además, la parte de investigación sobre el bisabuelo de Alexia, la que nos introduce en la Guerra Civil, también es muy interesante, porque consigue que las piezas encajen sin tener que dar muchas piruetas, pero tampoco siendo evidente.

Libertad ante todo

En este caso, sin embargo, soy muy cauta. A priori no recomendaría la novela por los peros que he dicho, sin embargo, si hago un voto de confianza en los lectores jóvenes, sí que la recomendaría.

Creo que la parte histórica, las reflexiones sobre lo que fueron «los caminos de libertad» y las implicaciones para las familias afectadas están muy bien explicadas y argumentadas. Además, la parte de los temas de los adolescentes, muestras realidades que les son cercanos y si aplican el punto de vista crítico ya la novela les está sirviendo para poner en jaque esas situaciones.

Que es verdad que la literatura no tiene por qué servir para nada, es cierto, pero cuando está en su intención, al menos saquemos el lado positivo. Por ello, os recomiendo Caminos de libertad, es una lectura sencilla que nos enseña cosas y nos revoluciona en otras. Espero que os animéis con él.

El Libro en el Bolsillo

Consigue la novela 👉: Caminos de libertad de Maite Carranza

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