[LC] Una monstruosa variedad. Sobre ‘¡Gritos y espantos!’ de Jirac Caro Thachar

La semana pasada fue la fiesta de Halloween y os reconozco que es una celebración que siempre me pasa un poco por encima. Cuando era adolescente sí que lo celebraba alguna vez, más yéndome de fiesta que con los caramelos, claro; pero ya más mayor tiendo a la pereza. No soy una persona religiosa, pero sí que me dan respeto muchos de los terrores hallowenescos y, además, al día siguiente comienzo mi período anual de caída en picado, así que lo dicho, me pasa por encima.

Sin embargo, este año me apetecía, aunque fuera hacer un algo, así que participé en la fiesta de Halloween de Embajadores de Libros y me uní a su lectura conjunta de la obra que reseñamos hoy aquí. El libro se llama ¡Gritos y espantos! y está escrito por Jirac Caro Thachar, un libro lleno de pesadillas y muchas cosas que descubrir. Espero que os guste.

Ten cuidado, algunas cosas es mejor dejarlas en paz, otras están destinadas a ser leídas en la oscuridad.

¿Qué horror le espera a un niño que cree tener un nuevo amigo que vive en un armario? ¿Cómo escapas de ser aplastado por tus padres como si fueras un insecto? 

¿Qué hace que una tienda de mascotas se convierta en el lugar más aterrador de todos? Estas y muchas otras peripecias te esperan entre las páginas.

ADVERTENCIA: algunas historias incluyen violencia moderada y otros elementos terroríficos que pueden no ser adecuados para algunos lectores. Se aconseja la supervisión de los padres.

Lo que buscan lo encuentran

Hugo es un niño muy curioso al que le encantan las películas de terror, sin embargo, esta noche no verá una película con Jenni su cuidadora, sino que intentará entrar en la habitación de sus padres. Estos, admiradores de todo lo oculto y misterioso, guardan algo en ella que no quieren que Hugo encuentre. Sin embargo, el muchacho lo encuentra y resulta ser un libro que le hará pasar una verdadera noche de terror.

Y al igual que a nuestro protagonista, sabemos que a muchos de nuestros jóvenes les encantan las historias de terror con cierta carga de espanto, sin embargo, siempre es difícil encontrar una obra que cumpla con sus expectativas y que no llegue al punto de lo traumático.

Por ello, ¡Gritos y espantos! se convierte en una buena opción para satisfacer esa curiosidad (como bien dice el autor, siempre supervisados por un adulto, claro), ya que se trata de un libro de relatos, unificados bajo la historia de Hugo, nuestro protagonista, que se pueden leer de manera independiente, así como unificada.

Un aspecto general

Lo que tienen en común todas las historias, incluida la principal, de esta obra es que tendremos un niño como protagonista que tendrá que bregar con un monstruo típico. El punto diferenciador, en este sentido, es que en estas historias esos monstruos no son el terror y ya está, que también, sino que, además, reflejarán cierta mala baba, condenarán cierto aspecto social sin que podamos llegar a ver una moraleja soterrada, pero a la que se nos puede invitar.

La estructura por su parte será la misma a lo largo de la obra. Hugo se pondrá en peligro leyendo uno de los cuentos, se nos relatará el mismo, que a su vez comenzará con un niño curioso que se pone en peligro sin saberlo. Lo interesante será que en todos los casos el antagonista tendrá inteligencia y pericia, cosa que a lo mejor no es tan habitual en estas historias.

Además, a nivel de estilo el autor ha optado por no censurar lo que realmente quiere contar, por lo que tendremos escenas que sin ser gore sí que tendrán ese toque de terror justo para que no sea una historia de susto y ya está. En este sentido, me ha gustado especialmente porque me parece muy buena manera de introducir el terror en la novela juvenil.

Concreción

Recopilando ahora que terminado la obra, como es lógico, hay relatos que me han gustado más que otros. Ahora os hablaré un poquitín de ellos sin hacer spoilers, pero sí para explicar qué es lo que me ha gustado. Eso sí, no dejaré los nombres porque creo que viene muy bien descubrirlos en el momento.

En el primer relato, nos encontraremos a un muchacho llamado Pedrín que tiene fama de ser muy asustadizo. Este será el motivo de todo el relato y la causa de la aventura de nuestro protagonista. Un día pierde una pelota de béisbol en casa del viejo Hocicolmillo, donde dicen que desaparecen niños, y allí será donde descubra al ser que en este caso será el que nos ofrezca pesadillas. Lo interesante de este relato es el porqué de ambas partes y sobre todo el nivel descriptivo de algunas escenas, que desde luego te dejan mal cuerpo y temiendo los armarios.

En el segundo relato, nos encontraremos uno de los temas que a mí me dan más miedo que es la relación entre hermanos. Esto que de por sí no conlleva nada monstruoso, puede truncarse y endemoniarse. En él podremos ver que el miedo depende de la perspectiva y la capacidad de provocarlo según la posición en la que te encuentres. Un relato incómodo, pero que tiene mucha miga.

En el tercero, se nos invierte curiosamente la perspectiva. La evolución de la historia nos llevará a ver cómo lo monstruoso se convierte, finalmente, en víctima de algo que no puede controlar. Este me ha parecido muy especial, por cómo se trabaja la cuestión de la familia.

Finalmente, el cuarto y el quinto son los que menos me han llamado la atención, ya que partían de base de clichés que no son los que más me suelen emocionar. Por un lado, tendremos el tópico del monstruo encubierto, que aparenta ser lo que no es. Este caso, el punto de terror es la espera de confirmar lo que ya se sabe y cuando comienza a desarrollarse un punto creepy que sin ser muy fuerte no me ha entusiasmado. En el otro, llegamos al típico cuento de la bruja. Y eso es todo.

El andar incierto

Como decíamos al principio todas estas historias tienen un hilo conductor, la historia de Hugo, así que entre relato y relato Hugo seguirá con su propia historia de terror particular. Esta me ha gustado bastante por lo salvaje de la misma y por la implicación de más personajes que solo el protagonista. A él se une Jenni, su cuidadora, con la que serán testigos indirectos de que las historias del libro no son los únicos cuentos de terror que se están desarrollando.

En general, es una obra que entretiene mucho y que te permite pausar, cosa que también se agradece cuando hay terror de por medio. El estilo del autor, como he dicho más arriba, es muy interesante porque es sencillo, claro y explícito sin llegar a lo exagerado o improcedente.

Me parece una buena propuesta de literatura juvenil, una muy buena manera de introducirnos en la novela de terror y de disfrutar de ese escalofrío y temor que nos sobrecoge con estas historias. Espero que os animéis con ella y que lo disfrutéis.

El libro en el Bolsillo

 

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