Es el caso de la obra que reseñamos hoy aquí, Leo quiere a Aries, un gran éxito dentro del mundo Kindle y que a día de hoy sigue en el top cien de los libros del género. Está escrito por Anyta Sunday y es la primera parte de la serie Signos del amor. Lo he leído junto a los compañeros del Club de Lectura de Fénix Club Literario. Espero que os guste.
Theo Wallace, un leo perezoso y divertido, necesita encontrar una amistad verdadera, de esas que duran para siempre.
Una amistad que le ayude a superar el pasado y a centrarse en un futuro más brillante y prometedor.
Jamie Cooper, un aries sensato y entusiasta, podría ser ese amigo. Está hecho tan a su medida que es como si lo suyo estuviera escrito en las estrellas. Es el compañero de piso perfecto. Todo va bien y es muy divertido. Mucho más que divertido. Pero ¿qué significan esas largas miradas que Jamie le dedica a Theo? ¿Y qué son esas mariposas que Theo siente en el estómago?
Una amistad bien avenida
Theo está en su último año de carrera rozando la excelencia, sin embargo, una de las asignaturas está atragantándosele un poco porque el profesor es un pelma. Es por esto por lo que decide contactar con Jaime Cooper, su extutor, y este termina no solo ayudándole sino convirtiéndose en su compañero de piso.
Tres personajes, tres circunstancias y dos signos del zodiaco nos introducen en esta novela romántica lgtb. El inicio es claro, dos hermanos, Theo y Leonne Wallace, buscan compañero de piso; este será Jaime Cooper, un hombre serio, muy correcto y protector. Sin embargo, después de un inicio de tiras y aflojas veremos cómo se fabrica un romance a fuego lento, que todo el mundo ve, excepto los protagonistas…, bueno, uno de ellos.
En valor
Lo primero que me gustaría destacar de la novela es el romance en sí. No soy muy aficionada al género porque todas las historias suelen parecerme igual, sin embargo, esta ha tenido un punto muy interesante para mí, a pesar de que hay gente que lo critique.
El problema principal de la historia es Theo que es un personaje con una tendencia a la estupidez bastante recurrente. ¿En qué sentido podemos ver esto? Aparte de su ceguera evidente en cuanto a la relación romántica, sí que es verdad que tiene ciertas actitudes infantiles y sobre todo egocéntricas, pero, como os podréis imaginar, esto irá cambiando poco a poco.
Ese cambio, que podía asustar al lector que ya se imagina lo que está sucediendo, se hace de manera tan natural en el libro que lo he disfrutado muchísimo. Esto es, no nos encontramos ante una persona heterosexual que descubre que es homosexual, sino a un hombre que descubre que le gusta otro hombre y no tiene ningún reparo en ello. Por qué me parece interesante esto, porque, aunque es verdad que la novela se queda en esa idea un tanto laxa y floja de «enamorarse de la persona», precisamente la naturalidad y poco hecho traumático que supone este enamoramiento para él mismo y quienes le rodean me ha gustado mucho. Además, la obra se publicó en 2018 y, sinceramente, creo que para la época era bastante subversiva.
El entretenimiento
Eso sí, el protagonista, como he dicho, es un tanto odioso, así que donde encontramos el entretenimiento real y los puntos cómicos del libro es en el resto de personajes.
Los personajes femeninos de la novela serán, fundamentalmente, las madres de los implicados y Leonne. En el primer caso nos encontraremos con dos mujeres muy dispares, pero con un gran amor por sus hijos. La madre de los Wallace será la instigadora del seguimiento del horóscopo y la que anime a sus leos a encontrar sus aries correspondientes. Por su parte, Leonne será el personaje que nos sirva de foco lector y el que ponga en jaque constante las observaciones y decisiones de su hermano Theo.
Además, encontraremos escenas muy interesantes desde el punto de vista del enredo, donde cada uno de los personajes tendrá una perspectiva diferente, aunque nosotros como lectores recibamos esencialmente la de Theo.
El estilo de la autora también favorece esto, ya que es sencillo y ágil, aunque quizá sea en este punto donde más peros pongo a la novela. El vocabulario utilizado para las escenas de sexo para mí, y he leído novelas con sexo explícito, es demasiado basto y poco pulido, en algunos puntos, con perdón, parece un fanfic porno más que una novela de romance con sexo.
Además de esto, el final de la novela no me ha terminado de conquistar. Ya sabemos que en la romántica el momento de la declaración/descubrimiento de sentimientos tiene que ser en cierta medida sino apoteósico sí algo especial y en este caso no ha sido así. El descubrimiento se hace de una manera muy accidentada y el final, para mi gusto, es muy precipitado y poco elaborado.
En conclusión…
Pues en conclusión y a pesar de estos últimos peros que he indicado, es una novela que me ha gustado y me ha reconciliado un poquito con la romántica. Es cierto que no voy a seguir con la serie, precisamente porque me cansaría eso de que se repitiera la fórmula, pero esta me lo ha hecho pasar bien, me ha resultado ágil de leer y, aunque el personaje principal es un poco imbécil, me han gustado los personajes y su personalidad.
Así que sí, la recomiendo, aunque solo sea para darnos una pausa en leer a lo mejor otras obras más densas. Creo que si vamos con la expectativa de solo pasárnoslo bien, es una novela que funciona. Espero que os animéis con ella y que os divirtáis.
¡Hola!
ResponderEliminarTengo este libro en digital, sí que dio un boom, pero todavía no me he animado con él. Me alegra leer que te ha gustado, a pesar de que no haya sido perfecto y que no vayas a continuar con la saga (aunque te entiendo por lo que comentas).
¡Gracias por la reseña!
Un beso.