[Reseña] El cliché de Jacob. Sobre ‘Novia’ de Ali Hazelwood

No sé cómo de cierto es lo que voy a decir, pero hay una generación de lectoras, a la que pertenezco, que hemos vivido con intensidad el trío vampiro – humano – licántropo, posicionándonos en alguno de los extremos de esa combinación. A medida que hemos ido avanzando en la lectura de novelas con este cliché, se nos han ido combinando otros factores (ejem… ¿dragones?) por lo que esa oposición de lobas o vampiras se ha diluido bastante. Sin embargo, siempre reconocimos uno y otro lado, Jacob, los licántropos en casi todas salían perdiendo.

Hasta ahora, porque en la obra que presentamos hoy aquí, se nos pone delante a un licántropo bastante bien plantado como nuestro foco del salseo. La novela que hace este cambio es Novia  Ali Hazelwood, publicada por Faeris Editorial, con la que he descubierto a la autora, ya que no me había lanzado a sus novelas de salseo científico. Espero os guste.

Una peligrosa alianza entre una novia vampira y un licántropo alfa da lugar a una historia de amor tan intensa como para querer hincarle el diente

Misery Lark, la única hija del consejero vampírico más poderoso del suroeste, es, de nuevo, una marginada. Los días de anonimato entre los humanos se le han acabado: su padre recurre a ella para poder llevar a cabo una alianza de paz histórica entre los vampiros y sus enemigos mortales, los licántropos, por lo que no le queda más remedio que resignarse al intercambio. Otra vez...

Los licántropos son despiadados e impredecibles, y su alfa, Lowe Moreland, no es la excepción. Lidera a su manada con total autoridad, pero siempre de forma justa y, a diferencia del consejo vampírico, con compasión. Por el modo en que no pierde de vista a Misery, está claro que no se fía de ella. Y bien que hace...

Porque Misery tiene sus motivos para haber accedido a ese matrimonio de conveniencia, motivos que nada tienen que ver con la política ni con ninguna alianza, sino con lo único que le ha importado en la vida. Y está dispuesta a hacer lo que haga falta para recuperar lo que ha perdido, incluso si para ello debe vivir a solas en territorio licántropo; a solas con el lobo.

La historia se repite

Misery no se fía de su padre, uno de los consejeros vampíricos más importantes, y cómo iba a hacerlo, si con ocho años la mandó a territorio humano para mantener la paz. Ahora ya toda una adulta sabe que si padre quiere hablar con ella algo esconde, lo que no se esperaba era que fuera una boda, en concreto la ella misma, con el alfa de la manada licántropa, Lowe Moreland. Y encima le preguntan, como si tuviera opción a decir que no.

Lo cierto es que esta novela de fantasía nos deja las cartas encima de la mesa muy pronto: vamos a asistir a la relación romántica entre Misery, nuestra vampira, y Lowe, un licántropo un tanto imponente. Obviamente, como podemos esperar, el principio no será fácil, pero es que, además, la autora pronto nos hace ver que esto no es lo importante de la historia. Así, asistiremos a la investigación de ambos personajes harán de la situación política dentro de la manada y la relación con las otras dos especies,  humanos y vampiros. Intriga, política y alianzas se ven desarrolladas en una historia, donde el romance está de fondo, pero que se justifica en las andanzas de los personajes. Maravillada me hallo con esto, gracias Ali.

La política como motor

Y es que, siempre que nos adentramos en este tipo de historias, la relación entre los protagonistas inunda todo y eso está muy bien, pero a veces sí que parece un poco forzado. En este caso, la autora ha dado la vuelta a la historia, la trama principal serán dos investigaciones paralelas: la de Misery, que investigará a los licántropos, y la de la mana que investigará de dónde están recibiendo los ataques en su propio territorio. Mientas estas se suceden, se nos irá contando cómo es la relación política entre las especies, se nos justifica esta relación y se nos cuenta un poco de historia entre ellas.

Rápidamente y sin hacer spoiler, la base de la historia es que vampiros y humanos mantienen una alianza por garantías, esto es cada especie cría a un niño de la especie contraria so pena de matarlo si se rompe la alianza. Esto es importante porque Misery ha sido la garantía de los vampiros en su niñez y, como veremos, esto configurará al personaje, aparte de explicarnos cómo es la política.

Por su parte, la manada de licántropos siempre ha estado al margen por ser violentos e impulsivos, sin embargo, su nuevo alfa, Lowe Moreland, se postula como un líder sensato, que lo primero que ha querido hacer es establecer relaciones con los humanos y aceptar la boda con los vampiros. Como veis, la complejidad de esta cordialidad tensa se nos explica desde un principio y navegaremos a través de ella durante toda la novela, de manera que los acercamientos entre Lowe y Misery serán puestos en jaque en todo momento: intereses políticos, amenaza de guerra y, por supuesto, especies diferentes.

¿Cuáles son las diferencias?

Aquí me paro un poco porque, aunque la novela me ha gustado bastante tanto en la parte romántica (de la que muchas sabéis que ando despegada últimamente) como en la trama de investigación e intriga (que he devorado como hacía mucho tiempo que no leía una novela), hay un punto que me ha ocasionado un poco de shock.

No quiero hacer el gran spoiler porque creo que, sin ser uno de los puntos vitales de la novela, sí que es una pequeña apreciación (casi gracieta) con la que la autora nos quiere pillar. Sin embargo, sí creo que sea justo hacer la advertencia.

Como se nos vende la propia novela, es una obra romántica con lo que, os imaginaréis, Lowe y Misery tienen su affair en la obra. Es cierto que tarda bastante, cosa que me ha gustado porque para cuando llega la atracción y la relación está bastante justificada, incluso dentro de los cánones de fantasía e inmediatez a los que estamos acostumbradas. Sin embargo, cuando ya por fin parece que la cosa va a funcionar se nos advierte de cierta incompatibilidad entre especies. Y aquí lo dejo, yo como lectora estuve dándole vueltas al asunto, esperando casi cualquier cosa, pero no caí en lo que finalmente se describe y es… inquietante… quizá casi llegue a algún tipo de filia… No sé deciros porque aún ando confusa con ese hecho de la obra.

Y encima acaba

Finalmente, otra de las cosas que más me ha gustado y que he agradecido es que la novela no nos mete en una eterna trilogía vapirolicántropa. Últimamente parece que todas las historias de fantasía tienen que durar hasta el infinito y se agradece que la historia de Lowe y Misery se cierre, aunque bien es cierto que se puede sacar otra novela en este mundo, ya no sería con los mismos personajes.

Por otra parte, sí cabe decir que a nivel de estilo nos encontramos con una novela muy explícita. Los sentimientos, el vocabulario, las relaciones sexuales y los diálogos son todos directos y no se andan con rodeos. En algunas ocasiones sí que quizá me ha llamado de más la atención, sobre todo en las escenas de más temperatura, pero también es cierto que agiliza mucho la lectura y se convierte en una trama transparente.

Lo cierto es que creo que es una lectura que os puede gustar y enganchar bastante. Recordemos ese pequeño pero que me surgía en la relación entre los protagonistas, que para mí lo ha sido, pero para otro lector no habría problema, seguramente. Así que, espero que os animéis con ella y que disfrutéis mucho de este nuevo mundo de criaturas de la noche.