[LV] Son el futuro. Sobre ‘Los niños elegidos’ de Carlos Rubio Palao

Cuando era pequeña, siempre entendía con cierta pesadumbre esa frase de que los niños éramos el futuro (de hecho, incluso Los Simpson llegaron a hacer una parodia de esa idea). Ahora que soy mayor creo entender un poco mejor a qué se referían, pero también no dejo de pensar que cargamos con nuestras incapacidades, con nuestras resignaciones a las generaciones siguientes. Dejar de luchar no solo implica que tú no hagas nada, sino que cargas al que va detrás de ti.

Creo que por eso la literatura juvenil de niños que son la promesa del mañana nunca pasará de moda y esa idea es la que nos trae hoy aquí. La novela que presentamos se llama Los niños elegidos de Carlos Rubio Palao, publicada por Numak, y la he leído gracias a la iniciativa de Libros Viajeros de la Asociación Pórtico. Espero que os guste.

Han pasado cuarenta años desde que las guerras y catástrofes naturales acabaran con el mundo tal y como lo conocemos hoy. Las Ciudades Protectoras depositan desde entonces toda esperanza en los niños elegidos que, como Kanae y su hermana Yumi, nacen tocados por el Don.

Nación vela por el futuro de la humanidad, y dicta que los niños elegidos deben estudiar en la Escuela de Poder hasta los 17 años, alejados de sus familias y seres queridos, a salvo de las amenazas que todavía asedian los restos de la Civilización.

Kanae siempre ha sido el mejor niño elegido de su promoción, pero justo cuando el Don parece abandonarlo, descubre algo que hará temblar los cimientos de la Escuela, y de su propia razón.

Solo una pregunta

Kanae lleva toda su vida en la escuela. Sabe que en algún momento tuvo que llegar a ella, pero ya no lo recuerda. Ahora su vida se centra en el Marcador, su grupo y superar a Allen. Sin embargo, las piezas no encajan; a tan poco de la posible graduación comienza a ver que no todo es lo que parece. Las pesadillas, la tensión a la que les someten en la Escuela de Poder y la relación con su Don le llevan a explorar rincones que quizá deberían quedar ocultos.

Una vez más nos embarcamos en una novela juvenil  en la que en un mundo distópico, donde todo ha sido asolado por la guerra y los desastres, encontramos a un protagonista que destaca por sus destrezas. Sin embargo, como suele ser frecuente, algo no encaja en ese sistema indiscutible y nuestro protagonista, Kanae, avanzará en la investigación de la realidad oculta bajo la propaganda.

Una pregunta, si es feliz o no, lanzará a Kanae a descubrir la verdad y a intentar salvar a su hermana melliza, Yumi, y sus amigos, Drew y Shiro, en una contrarreloj indiscriminada.

Algo parecido

Con la premisa que acabamos de explicar, no parece descabellado decir que la novela nos acerca a horizontes ya conocidos. El mundo distópico en el que unos niños tienen que entrenarse por destacar y salvar al mundo, llegando incluso a enfrentarse entre ellos, lo hemos visto en un montón de producciones: Battle Royal, Los juegos del hambre, Divergente… Obviamente, no todas se parecen entre sí al cien por cien, y nuestra novela destaca por dos ideas base: todos los alumnos tienen el objetivo de ser los primeros del marcador y que en esta historia se prima mucho más la parte emocional y reflexiva que la de batalla o competición (que las hay, por supuesto).

De este modo, y a pesar de las partes que reconocemos, la trama nos introduce en el nivel emocional de nuestro protagonista, Kanae. Sin tener que preocuparse por su clasificación, ya que es de los primeros de su promoción, el muchacho comienza a plantearse el sentido de todo el sistema. Lo que le lleva a dar los primeros pasos es el aislamiento al que están sometidos y cierta advertencia sobre los lazos que mantiene con su hermana melliza, que también está en la Escuela de Poder. A partir de ahí, el muchacho comenzará a investigar y su primer movimiento será físico, salir de la Escuela.

La ganancia

En el momento que Kanae da el primer paso, nos lanzamos como lectores a la incertidumbre más absoluta. A medida que la trama avanza, las preguntas son cada vez más frecuentes y las respuestas se hacen de rogar. Bajo el lema «aún no estás preparado», protagonista y lectores nos quedamos con la duda de qué es lo que realmente se va descubriendo, así que en esa espera, a lo que más nos agarramos es a los personajes.

Y es que los personajes de esta novela destacan mucho tanto por su buena configuración de personalidad como por su diversidad de caracteres. No hay dos iguales y, aunque hay alguno que puede ser personaje tipo (como Allen, el malote), sus facetas nos muestran una complejidad de pensamiento y de comprensión de las circunstancias muy interesante. Con esto me refiero a que ante diferentes situaciones se nos ofrecen, a través de ellos, diferentes análisis de la circunstancia. Esto enriquece mucho la lectura y nos ayuda a entender mucho mejor las dudas y las decisiones del propio Kanae.

Además, más allá de su papel en la trama, cada uno de ellos tiene un hilo en sí mismo muy interesante de explorar. Mencionar a algunos sería hacer spoiler, pero sí que puedo decir que en general el grupo de Kanae será una fuente muy interesante de personalidades.

Hay más

La verdad es que si me paro un momento, reconozco que la novela se me ha hecho un poco larga, ya que he tenido la sensación de que tenían que entrar demasiadas cosas en ella (la clasificación, la selección, el torneo, los combates, etc.) y que no me he podido centrar tanto en el meollo del asunto (la trama de investigación, por ejemplo).

Sin embargo, después pienso en sí me ha gustado y me quedo con todos los personajes. Ninguno me ha sobrado y creo que todo lo que nos ha enseñado el autor de ellos ha estado muy bien. Además, me he quedado con ganas de saber qué pasa, ya que, como decía antes, son muchas preguntas que quedan sin resolver y que tienen pinta de traer una trama aún más interesante.

Es una novela que recomiendo, con tiempo y, sobre todo, con ganas de disfrutar el caos, el conflicto y la incertidumbre. Ya ha salido la segunda parte, Los hijos de Titán, así que me lanzaré a ella para ver qué nos depara esta nueva fase y, sobre todo, descubrir que esconden los Niños Elegidos. Espero que os animéis con ella y la disfrutéis.

El Libro en el Bolsillo

Puedes adquirir el libro 👉: Los niños elegidos de Carlos Rubio Palao

Puntuación: