Hoy nos lazamos a revisar la segunda parte de una trilogía, que espero que termine de ver la luz. Hace unas semanas reseñamos la primera parte de El Erador, así que hoy vamos con su segunda parte El Erador II. Los ojos de Celia Corral- Vázquez publicado por Drois & Druids. Espero que os guste.
Cuentan los relatos ancestrales que el segundo traidor de los que mataron al Erador se llevó sus ojos, que todo lo veían. Pero el huérfano Aidhan, de la estirpe de los cércenos de ojos, vive inmerso en un mundo de niebla en el que todos los rostros son indistinguibles, y el presente se confunde con los destellos de pasado y futuro que solo él parece ver.
Cuando su camino se cruza con el de una joven con el poder de los huesos y un muchacho de la estirpe de la lengua, decide ayudarlos a investigar las extrañas desapariciones que están sucediendo a su alrededor. Ya no es solo la sagrada Orden del Erador quien persigue a los cércenos para sacrificarlos; alguien está llevándose a los huérfanos por las noches, y sus intenciones parecen ir más allá de todo orden establecido.
En otro lugar
Sarna es un huérfano de la Colmena, un edificio donde los niños sin hogar duermen y sobreviven. Sin embargo, las cosas cambiarán pronto para Sarna, ya que hay dos personas que lo andan buscando. Con temor porque sepan su secreto, el muchacho intentará pasar desapercibido, sin embargo, los ecos verdes que es capaz de ver no paran de mostrarle qué hacen esas dos personas. Y cada vez están más cerca.
En otro pueblo, pero con otro protagonista masculino, nos lanzamos a la segunda entrega de esta trilogía de fantasía oscura. En ella, seguiremos los pasos de Aidhan, Sarna, un cérceno de ojos que malvive en las calles de la ciudad. En este caso, nos lanzaremos a una nueva investigación en la que intentaremos descubrir por qué están desapareciendo los cércenos.
En este sentido, no es necesario haber leído la primera parte, ya que la ubicación temporal es difusa, aunque hay algún guiño que sí que está bien saber.
Más acción, menos recorrido
Las comparaciones son odiosas, pero sí que me ha llamado la atención en esta segunda parte que, habiendo más movimiento de los personajes, me ha quedado la sensación de que nos han contado muchísimo menos. En la historia anterior, descubrimos y deducimos muchos datos del mundo, este que quizá en esta segunda parte podría expandirse o, al menos, revelarse de manera más explícita, se nos queda cojo.
En cambio, nos centramos mucho más en el recorrido del personaje y cabe decir que Aidhan tampoco progresa mucho más. Es un huérfano que no quiere ser capturado, ya que sabe que los cércenos están desapareciendo. En esa huida, encuentra a otros dos personajes, cércenos como él, que nos ofrecen la combinación completa (hasta el momento) de huesos, lengua y ojos. Sin embargo, su relación con otros personajes nos lleva a un vaivén narrativo de lo seguro e inseguro.
Esta dualidad es muy interesante, porque es verdad que provoca en el lector el desarrollo de la sospecha, en el que nadie es «bueno» o «inocente» del todo. Sin embargo, los movimientos temporales que se consiguen vislumbrar con el poder de Sarna, nos hacen no tener claro quién es quién ni cuándo es cuándo. Esto podría ser muy entretenido a la hora de disfrutar de la lectura, sin embargo, creo que penaliza mucho al final de la obra.
Aprehendiendo lo religioso
Si en el primero nos encontrábamos con un bucle mágico, en este caso nos encontraremos con un laboratorio científico (idea que ya se nos había planteado en la primera parte). Lo interesante de este laboratorio, más allá de lo que implica en la trama, es el desarrollo de la idea de que la ciencia es capaz de capturarlo todo, incluso los elementos religiosos.
Esto me ha gustado mucho, porque al final nos encontramos ante un mundo que cree en un pasado mítico, que tiene algunas pruebas de que este existió (como la existencia de los cércenos), pero que no está seguro de que realmente fuera como se predica. En este afán por conocer la verdad, nos lanzamos a una investigación que atraviesa los tiempos internos de la obra y cuyas conclusiones depende de quién sea el foco que las recibe.
De este modo, el conflicto de base se muestra muy interesante, aunque la concreción en la historia no me ha terminado de convencer por ser la exposición un poco caótica. No me meto mucho más porque estamos acercándonos a cuestiones que podrían ser spoiler, pero sí que reconozco que frente al tono de cuento mágico del primero, en el que descubrimos que la magia es mesurable, en este nos lanzamos a un cuento de «científico loco» que no termina de tener una justificación clara.
Intrigada
Desde luego, a pesar de que esta segunda entrega me ha gustado a medias –temas sí, personajes sí; concreción del mundo regulín, cientifismo loco… no sé yo– sí que tengo muchas ganas de leer la parte final.
Creo que muchas cuestiones de los personajes que conocemos en relación al mundo se tienen que explorar y nos pueden dar mucho juego. Además, el elemento mítico-religioso que está por descubrir me intriga muchísimo y la narración es muy amena y ágil, así que desde luego sí que te ayuda a desconectar una tarde con todas las garantías. Por ello, os lo recomiendo, podéis leer el primero antes o no, pero animaos porque la historia es curiosa un rato. Espero que os guste.
El Libro en el Bolsillo
Puedes adquirir el libro 👉: El Erador II. Los ojos de Celia Corral-Vázquez
Puntuación:


Comentarios
Publicar un comentario
Protección de datos: Según la nueva ley RGPD tengo que informarte del uso que daré a los datos personales que proporcionas.. Tu e-mail será usado para enviarte las respuestas al comentario, en caso de que marques la casilla. El resto de datos (IP, país, navegador...) que recopila Blogger solo serán usados para las estadísticas internas de Blogger. Tus datos en ningún caso serán publicados ni cedidos a terceros. Añadiendo tu comentario estás aceptando estos términos.